Saltar navegación. Ir directamente al contenido principal (Tecla de acceso S)

Fundación Princesa de Asturias

Sección de idiomas

Fin de la sección de idiomas

Buscar

Sección de utilidades

Fin de la sección de utilidades

  • Síguenos en:
#PremiosPrincesadeAsturias
Comienza el Menú secundario Fin del Menú Secundario

Premiados  

Comienza el contenido principal

Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y los Recursos Naturales y Fondo Mundial para la Naturaleza

Premio Príncipe de Asturias de la Concordia 1988

Intervención de S.A.R. Felipe de Edimburgo, presidente del Fondo Mundial para la Naturaleza.

Madrid, 18 de octubre de 1988

Perdonen que hable en inglés, pero no creo que si intentara hablar en español ustedes entendiesen palabra de lo que dijera.

El presidente mencionó la ocasión, hace unos años, cuando el duque de Lancaster estuvo involucrado en la creación del título de Príncipe de Asturias. Les sería interesante saber que la Reina ahora ostenta el título de Duquesa de Lancaster, y que cuando está en el Condado de Lancaster siempre se brinda a Su salud como "la Reina Duquesa de Lancaster". Otra cosa que me llamó la atención era que éste era un momento de paz, por así decirlo. Creo que hay un bastante... creo que quizás un acontecimiento. Aquí en Madrid, en el 400 aniversario de la Armada, hay un Felipe y una Isabel visitando Madrid, de hecho, hay dos Felipes aquí en Madrid en este momento.

En primer lugar me gustaría pedir disculpas por no haber podido asistir a la ceremonia de Oviedo, cuando todos los otros Premios Príncipe de Asturias fueron entregados. Siento que haya tenido lugar justo entre mi regreso de una visita a WWF en Francia y nuestra salida para España ayer por la mañana. Sólo puedo decir cuanto aprecio la generosidad de la Fundación en organizar esta ceremonia especial hoy.

No es necesario decir que estoy encantado de que el Fondo Mundial para la Conservación de la Naturaleza haya sido elegido con el honor de recibir este Premio. Y estoy aún más encantado porque fue concedido conjuntamente a WWF y a nuestros íntimos colegas en la conservación, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y de los Recursos Naturales. Las dos instituciones han ocupado la misma sede central en Suiza durante varios años, y ninguna de las dos podría esperar ser tan efectiva sin la colaboración y la cooperación de la otra. UICN es el centro mundial de información acerca de la situación de los ecosistemas del mundo, mientras que WWF recoge fondos y dirige los proyectos de conservación en la campaña. En líneas generales, WWF tiene dos categorías de proyectos: una concierne a la prevención de la extinción de especies individuales, y la otra concierne a la conservación de ecosistemas y hábitats. Por ejemplo, uno de los más importantes proyectos de conservación de especies fue el Tigre de la India. Hace 15 años, su número había descendido de 30.000 en 1940 a unos 1.500 hace 30 años. Hoy, el número se sitúa en unos 4.500 en doce importantes áreas protegidas. Y, por supuesto, el símbolo de WWF, el panda gigante, es el objetivo de un gran proyecto en cooperación con los chinos en estos momentos.

Y uno de los primeros proyectos de hábitat fue la compra de una zona crítica de las Marismas en el Coto de Doñana para salvarla de la explotación agrícola, y como ustedes saben, ahora forma parte de uno de los Parques Nacionales más importantes en España.

La familia WWF engloba 23 organizaciones nacionales, una de las cuales se encuentra aquí en España bajo la presidencia de don Carlos, y un creciente número de asociados, especialmente en estos países en que mucho del dinero es gastado. Desde que WWF fue fundada hace 27 años, ha llegado a ser la más grande organización para la conservación de la Naturaleza de capital privado en el mundo. Ha gastado unos 130 millones de dólares en unos 5.000 proyectos para la Conservación en más de 125 países. Y esto incluye el apoyo directo a la creación de parques naturales y áreas protegidas que ahora cubren una superficie equivalente a tres veces la de España. Y continuamos dando apoyo a estos parques y áreas protegidas a través de la formación de personal y del suministro de material. Y también colaboramos estrechamente con la UNESCO en el apoyo para los setenta y siete sitios de Patrimonio Mundial que son áreas importantes de yermo.

Una de nuestras actividades más importantes es la promoción de la concienciación. Si la gente no es consciente de la naturaleza de esta crisis ecológica y ambiental, es obviamente imposible persuadirles para darnos su respaldo financiero. Y a no ser que la gente en la zona donde esperamos iniciar proyectos de conservación entiendan lo que estamos intentando hacer, no tendremos ninguna esperanza de éxito.

En términos generales, nuestro propósito es mantener la diversidad genética del mundo, lo que significa salvar especies animales y vegetales de la extinción. Para conseguir esto, nosotros concentramos nuestros esfuerzos en cuatro áreas: la conservación de las selvas tropicales, que albergan un 80% de todas las especies de animales y plantas conocidas, en segundo lugar la conservación de las tierras húmedas, que tienen una especial importancia para especies migratorias, tercero, los océanos, con sus inmensos recursos naturales, y cuarto, la protección de áreas estériles, como el Antártico.

Las amenazas a la salud física y biológica del mundo natural provienen principalmente de dos factores. El primero es la presión humana, y ésta es causada por lo que se puede llamar las tres "P"s: población, progreso y polución. La población humana se ha incrementado cinco veces en los últimos 2.000 años. El total actual es de cinco mil millones y todavía está creciendo. El Informe Bruntlent sólo prevé que se estabilice en algo entre siete mil millones y medio y catorce mil millones a finales del próximo siglo. Más gente necesita más tierra y más recursos, y esto inevitablemente desplaza a todas las demás especies.

El progreso de la ciencia y la tecnología ha creado niveles de vida siempre en aumento, y la ocupación de más tierra para la industria y la agricultura. La polución, que es una función del incremento de la población, y de las actividades humanas en general.

La segunda gran amenaza a la supervivencia de especies salvajes de plantas y animales viene de la creciente demanda humana para especies salvajes y sus productos. En un esfuerzo por reducir esta demanda IUCN y WWF trabajaron juntas para establecer la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies en Peligro, CITES, como se la suele conocer.

El hecho es que el tráfico ilegal en peces y pájaros tropicales, cuernos, colmillos, pieles, huevos y plantas cogidas de la selva, como cacti y orquídea, sobreexplotación de los océanos y los bosques, están amenazando directamente la sobrevivencia de un gran número de especies.

Esa, pues, en muy pocas palabras, es la situación que se presenta a WWF pero se podrían preguntar "¿Por qué? ¿Por qué preocuparse?". "¿Qué nos importará a nosotros si todos estos animales y plantas poco conocidos llegan a extinguirse?". Y yo creo que hay probablemente tres respuestas: Primera, cada extinción amenaza el futuro de la vida sobre la Tierra; al final le tocará el turno a la misma especie humana. Tal como es ahora, la gente de los países menos prósperos empieza a sentir los efectos de la erosión y la pérdida de los recursos naturales. Para ayudar en la conservación de toda la vida en la tierra, necesitamos la comprensión, la ayuda y el auxilio de las principales agencias de apoyo y desarrollo para asegurar que todo el desarrollo se puede sostener a largo plazo en términos ecológicos.

Y segunda, algo parecido al alpinista: se pregunta a alguien que escala una montaña por qué lo hace y dice "Porque está allí". Así que el segundo motivo para la conservación de la Naturaleza y para preocuparse de ella es porque está allí. Tenemos este maravillosamente rico patrimonio natural, y sería un acto de enorme vandalismo aniquilarlo en un ataque de ignorancia y dejadez, y es aquí donde necesitamos la comprensión y el apoyo de todo el mundo científico, no sólo de aquellos a quienes le interesan las ciencias naturales. Sabemos lo que hay que hacer, pero precisamos investigación científica para decirnos cómo hacerlo. Y la tercera razón es porque es parte de la creación de Dios, y es por lo tanto un deber sagrado cuidarla y entregarla ilesa a generaciones venideras.

Sabemos que el futuro de la humanidad depende del correcto funcionamiento de los sistemas físicos y biológicos del globo, pero la gente ha de tener un compromiso emocional y sentir una obligación moral si vamos a tener éxito. Y yo creo que eso sólo puede venir de la dirección espiritual de las grandes religiones.

Alteza, señor Arango, les agradezco calurosamente en nombre de toda la familia de WWF el honor singular y el ánimo que nos han brindado a todos y a todo el movimiento para la conservación al adjudicar este premio a WWF.

Gracias.

Fin del contenido principal

Sección de utilidades

Fin de la sección de utilidades